lunes, 30 de julio de 2018

IMAGINARIOS


MEDELLIN, Una ciudad que merece ser contada.

Los rincones, las calles y las esquinas de nuestra ciudad y sus corregimientos están llenos de historias, unas alegres y otras no tanto que recogen y reflejan las distintas realidades de unos territorios en permanente construcción.

Es necesario buscar y visibilizar esas historias que están presentes en cada comuna y corregimiento de nuestra ciudad. Utilizar todas las posibilidades narrativas que nos demanda la web y las posibilidades de ínter acción entre las narrativas audiovisuales y los prosumidores para divulgar esos imaginarios de desarrollo que sueñan el habitante de a pie de los barrios de nuestra ciudad.

Mapas de ciudad digitales, clasificación por temáticas de las historias, (liderazgos, sitios que hablan solos, innovación social, manifestaciones y movilización desde el arte y la cultura) , son entre otras algunos de los aspectos relevantes que encontramos en cada rincón de la ciudad.

Abrir este escenario de imaginarios de desarrollo permitirá abrir una caja de pandora donde muchos desearan poder contar sus historias y brindar sueños individuales y colectivos que se gestan en las acciones comunales, en los grupos juveniles en las corporaciones y en las distintas organizaciones sociales que cuentan con un acumulado histórico de trabajo social y comunitario en la construcción de territorio.

Así mismo el proyecto estará dotado de todas las posibilidades y vínculos con las redes sociales para que los prosumidores lo puedan compartir y dar a conocer de la forma más amplia posible.

La ciudad cuenta con liderazgos que han marcado de manera significativa los barrios y a sus habitantes y que han sido ejes transformadores de las distintas dinámicas sociales.
Las épocas aciagas y oscuras que han enlutado y marcado de manera permanente a los habitantes de la ciudad. Pero también son las historias de resistencia y resilencia donde  el arte, la cultura, la organización social y comunitaria han tenido un papel preponderante frente a superar el conflicto armado urbano, el narcotráfico y los distintos episodios violentos que durante décadas han afectado a Medellín.

Muchos de esos liderazgos se quedaron plasmados en la memoria de las comunidades, lastimosamente en buena parte por ser liderazgos que la violencia le arrebato a la ciudad y cuyas luchas y causas permanecen indemnes en la memoria colectiva de nuestros barrios.


Liderazgos como el de Silvio Salazar Martínez, Haider Ramírez o Jesús María Valle, impregnaron la ciudad de valores altruistas e inspiraron en los ciudadanos  construir  sobre la base de sus legados. Distintas manifestaciones de resilencia y resistencia; teatros al aire libre, movilizaciones sociales a partir del arte y la cultura, escenarios culturales, deportivos, sedes sociales entre otras han inmortalizado los nombres de aquellos que con su ejemplo y sangre lo entregaron todo por los territorios.

Pero también las calles se han convertido en galerías urbanas, recorridos históricos, sitios de encuentro y desencuentro que nos hablan de la otra Medellín, una  ciudad desconocida para muchos, oculta y que reclama ser contada.

lunes, 20 de noviembre de 2017

La comuna que me sueño



El proyecto La Comuna que Me Sueño  con niños y niñas de los barrios de la comuna 13 San Javier comenzó con la expectativa de conocer como sería el alcance de las historias, y las dinámicas de creación. Dio inicio realizando un sondeo entre ellos que permitiera identificar los intereses, las capacidades y los sueños que tienen acerca del territorio, y como se lo visionan cuando sean adultos, al escoger una carrera, un oficio, o una disciplina.

Por esta razón nuestro proceso se ha enfocado en la sensibilización mediante ejercicios de oralidad, lectura y escritura y creación visual, audiovisual y en animación, con el fin de crear piezas de comunicación que permitan difundir y promocionar las ideas sueños, y propuestas de los niños y niñas que habitan en los barrios de San Javier.

También se propició un encuentro intergeneracional que permitiera compartir y transmitir conocimientos históricos del barrio, la historia de las familias que conformaron los primeros pasos del barrio, y las formas en que se ha habitado el territorio. Esto permitió que niños y niñas dialogaran con adultos, vecinos y vecinas que podían tomar la palabra, la escritura de sus propias versiones de vivir en Medellín.


Complementario a esto se realizó varios recorridos territoriales, acompañados de talleres de cartografía social, para identificar puntos importantes en la memoria comunitaria, y la identificación con palabras con las que asociamos  el territorio y así brindar poesía a zonas vedadas del barrio, o a los que nunca imaginamos que llegaría la palabra viva, la palabra de amor y solidaridad.

La maratón de lectura fue un hermoso encuentro entre niños y niñas, jóvenes y adultos. Un espacio para compartir para disfrutar de los conocimientos previos que se tienen del barrio, y las formas como las visionamos. Se difundió   historias, formas de escribir y de hacer, de nuestra historia un cuento para reivindicar.


Para complementar nuestro proceso, se motivó a los participantes para que construyeran relatos con un enfoque comunicacional, de esta forma el taller de radio buscó generar un paisaje sonoro acerca de los sonidos a los que están habituados en el barrio. El taller literario busco fortalecer las capacidades en narrativa y  destrezas de escritura, con saberes previos y conocimientos ancestrales. El taller de fotografía permitió acercar la mirada a la construcción visual de los niños y niñas, que deseosos de fotografiar su comuna, realizaron ejercicios de iluminación, composición y encuadre dejando una serie fotográfica construida entre todos. Y por último el taller de animación Stop Motion, permite soñar, identificar esos animales mágicos que acompañan la imaginación de los chicos y chicas, y realizar un prueba de creación en plastilina, papel y colores, y realizar el ejercicio fotográfico foto a foto que luego se convirtió en un video animado, con un mensaje preciso, vivimos en nuestra comuna felices y contentos, por ser niños y niñas para la paz.